John Wayne Gacy conocido también como “Pogo” o el “payaso asesino” nació en Chicago el 17 de marzo de 1942 en el seno de una familia conflictiva, estaba muy unido a su madre y buscaba continuamente la aceptación de su padre alcohólico, pero lo único que conseguía eran golpes y humillaciones.

A una edad temprana se fue de casa y consiguió graduarse en gerencia empresarial, comenzó a trabajar y conoció a su primera mujer con la que tendría dos hijos. Posteriormente, su familia política le ofrecería un puesto de gerente en un famoso restaurante en Waterloo, Iowa. La familia mostraba estabilidad, eran queridos en el vecindario y Gacy además de barbacoas y fiestas para sus vecinos se disfrazaba de payaso para entretenimiento de los más pequeños.

Tras la imagen de encantador y afable vecino, se escondía una mente perversa que cometería crímenes atroces que nadie jamás habría sospechado. Construyó en el sótano de su casa una habitación especial donde invitaba a chicos adolescentes a beber e intentar a la fuerza mantener relaciones sexuales con ellos. Una de las víctimas abusadas pudo denunciarlo y Gacy fue sentenciado a diez años de cárcel, pero gracias a su buen comportamiento quedó en libertad al cumplir dieciocho meses de encarcelamiento.  Tras este hecho su mujer se divorció de él y perdió todo tipo de contacto con sus hijos.

Al salir de prisión se mudó a Illinois donde compró una nueva casa que se convertiría en una morada de horrores y torturas. Nuevamente conquistó con su carisma al vecindario, organizaba reuniones y actuaba como payaso para animar a niños enfermos en hospitales de la localidad, así se llegó a convertir en un miembro muy respetado de la comunidad. En esta nueva etapa conoció a su segunda esposa, pero el matrimonio duraría poco tiempo.

Durante la década del 70 John Wayne Gacy abusó, torturó y estranguló a 33 jóvenes de edades comprendidas entre los 14 y 21 años.

Fueron los padres de su última víctima los que dieron la voz de alarma ya que sabían que su hijo Robert Piest pasaría un rato con Gacy, al no regresar el joven ni tener noticias sobre su paradero, decidieron recurrir a la policía, los agentes en la ronda de comprobación hallaron en la casa de Gacy el cadáver de Robert estrangulado, el payaso asesino acababa de quitarle la vida.

Gacy enterró a la mayoría de las víctimas en el jardín de su casa y el resto confesó haberlas arrojado a un río cercano. Fue condenado a pena de muerte y ejecutado en 1994.

A continuación, un breve análisis grafológico de la firma de un asesino serial:

La firma está compuesta por las iniciales de su nombre “J” y “W” y su apellido semi legible “Gacy”, esto podría indicar descontento con la propia idea de sí mismo y cierto menosprecio del propio Yo frente a los otros.

En comparación con el resto de grafías se observan unas letras mayúsculas de grandes dimensiones que revelan una actitud compensatoria derivada de latentes sentimientos de inferioridad.

Toda la firma se desarrolla con una notable tensión gráfica y los trazos son intensos y muy marcados, por lo que la presión es firme, así pues, en el momento de realizar la firma el autor se encontraba en buen estado de salud y con gran vitalidad.

La inclinación de las grafías supera los 120º considerándose una escritura muy inclinada, lo que denota inmadurez afectiva y posibles pérdidas de control procedentes de una emotividad extrema.

Las formas curvas expresan cordialidad y amabilidad en el trato con los demás, dotes sociales y habilidad comunicativa.

La dirección del renglón es ascendente, esto implica un alto nivel volitivo y ambición.

Cabe destacar dos gestos tipo protagonistas en esta firma:

- “Uña de gato”, manifiesta una agresividad encubierta y una fuerte actitud defensiva.

- Inflados, ubicados en zona superior e inferior de la primera inicial, en este caso, representan un desarreglo imaginativo, y fuerte entrega a los placeres sensoriales.

El análisis grafológico ha sido realizado considerando todo el conjunto gráfico, es el resultado de un estudio en conjunción de todos y cada uno de los elementos que conforman la firma.

Lucrecia Di Santo.